Washington, 6 nov (Prensa Latina) El candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Joe Biden, amplía su ventaja en Pensilvania, pero el margen de diferencia respecto del mandatario Donald Trump sigue por debajo del 0,5 por ciento, y aviva hoy la posibilidad de recuento.
Así lo establecen en este país las leyes estatales, que Trump usa para desafiar al sistema electoral tanto como pueda, incluso al punto de acusar de fraude, con el objetivo de hacerse con la Casa Blanca por cuatro años más, coinciden analistas.
Biden logró tres días después de los comicios ponerse a la cabeza en Pensilvania, el territorio más codiciado por los candidatos y que, de ganarlo, le bastaría para hacerse con la presidencia.
Además de los 20 votos electorales que hay en juego, el triunfo del demócrata en este territorio sellaría la reconquista del llamado Rust Belt, el cinturón industrial que en 2016 le dio la espalda a Hillary Clinton.
Biden ya tiene asegurado Michigan y Wisconsin, aunque en este último le saca una ventaja del 0,6 por ciento a Trump, lo que se traduce en menos de 40 mil votos y late igualmente la posibilidad de recuento.
La región fue un bastión azul durante décadas, en la que el voto obrero le era fiel al partido sin distinciones.
Pero el golpe cada vez más duro que sufrió la industria manufacturera le pasó cuenta a los demócratas, quienes perdieron el apoyo de la zona hace cuatro años.
Con los datos disponibles hasta ahora, Michigan, Wisconsin y Pensilvania no muestran un vuelco profundo en su tendencia de voto respecto al 2016.
El mundo rural volvió a respaldar mayoritariamente a Trump, pero las zonas urbanas, más densas, educadas y diversas, salieron al rescate de Biden.
Por otro lado, en medio de las acusaciones del mandatario sobre votos ilegales y fraude electoral, la Agencia de Ciberseguridad, que depende del Departamento de Seguridad Nacional, salió al paso «sin mencionar al líder republicano※ para rechazar las acusaciones.
«Las oficinas electorales locales cuentan con medidas de seguridad y detección que hacen muy difícil cometer fraude a través de votos falsificados», refirió la agencia en su página de control de rumores.
En un tuit posterior, el director de la agencia, Chris Krebs, pidió a los ciudadanos que no se dejen engañar por la desinformación que trata de minar la confianza en las elecciones.